Nosotros somos el segundo equipo de 2º3 en crear un capítulo de nuestra novela, los integrantes son:
Demecio Gómez
Joaquín Fontes
Martín Idiarte
Hector Fontes
Carlos Gonzalez
Un día como acostumbraba, salió a caminar por Manhattan con Mikaela, una chica de su barra. Aunque esta vez, las dos salieron a recorrer las vidrieras, buscando ropa para asistir al cumpleaños de un amigo. Caminaron cuadras y cuadras entrando a todas las tiendas de la calle Manhattan View, aunque el dinero no les alcanzaba ni para comprar un simple anillo, ya que esta era la zona mas cara de la ciudad.
Después de caminar mas de veinte cuadras, decidieron llegar a un café para desayunar algo, ya que no habían probado ni una simple taza de café en su casa. Después de un rato charlando, y desayunando las mas ricas tostadas de la ciudad, Guadalupe se dió cuenta de que un chico que estaba de espaldas, detrás de Mikaela, tenía la cara conocida. Entonces decidió caminar disimuladamente hacia el tocador para verle la cara a aquella persona.
Cuando le vio la cara, notó que tenía un tatuaje de una cobra en el cuello, en ese instante, le dió un flashback, y su mente retrocedió diez años en el tiempo y recordó ese tatuaje de algun lado, pero no exactamente de donde. Cuando el tipo se estaba llendo del Café, Guadalupe pudo acordarse de quién era, y de donde conocía a aquel hombre, y hasta pudo recordar su nombre. El era un amigo que había conocido hace siete años. Era alto, con pelo corto, rebelde y rubio, de ojos claros.
Ella le puso la mano en el hombro, y le dijo mirándole fijamente a sus ojos:
-Rodrigo, eres tú?¿te acuerdas de mí?, Soy Guadalupe, tu amiga de la infancia...
Él la miro fijamente y por un instante no se acordó de ella, pero cuando escuchó que ella pronunció su nombre, la recordó.
El la invitó a tomar algo algún día que ella estuviera libre, porque quería saber algo más de su vida, desde que se dejaron de ver, ella, no estaba muy segura, porque hacía tiempo que no lo veía, y no sabía si había cambiado. Ella aceptó, aunque un poco insegura, pero aceptó, y quedaron de verse unos días después.
Demecio Gómez
Joaquín Fontes
Martín Idiarte
Hector Fontes
Carlos Gonzalez
Un día como acostumbraba, salió a caminar por Manhattan con Mikaela, una chica de su barra. Aunque esta vez, las dos salieron a recorrer las vidrieras, buscando ropa para asistir al cumpleaños de un amigo. Caminaron cuadras y cuadras entrando a todas las tiendas de la calle Manhattan View, aunque el dinero no les alcanzaba ni para comprar un simple anillo, ya que esta era la zona mas cara de la ciudad.
Después de caminar mas de veinte cuadras, decidieron llegar a un café para desayunar algo, ya que no habían probado ni una simple taza de café en su casa. Después de un rato charlando, y desayunando las mas ricas tostadas de la ciudad, Guadalupe se dió cuenta de que un chico que estaba de espaldas, detrás de Mikaela, tenía la cara conocida. Entonces decidió caminar disimuladamente hacia el tocador para verle la cara a aquella persona.
Cuando le vio la cara, notó que tenía un tatuaje de una cobra en el cuello, en ese instante, le dió un flashback, y su mente retrocedió diez años en el tiempo y recordó ese tatuaje de algun lado, pero no exactamente de donde. Cuando el tipo se estaba llendo del Café, Guadalupe pudo acordarse de quién era, y de donde conocía a aquel hombre, y hasta pudo recordar su nombre. El era un amigo que había conocido hace siete años. Era alto, con pelo corto, rebelde y rubio, de ojos claros.
Ella le puso la mano en el hombro, y le dijo mirándole fijamente a sus ojos:
-Rodrigo, eres tú?¿te acuerdas de mí?, Soy Guadalupe, tu amiga de la infancia...
Él la miro fijamente y por un instante no se acordó de ella, pero cuando escuchó que ella pronunció su nombre, la recordó.
El la invitó a tomar algo algún día que ella estuviera libre, porque quería saber algo más de su vida, desde que se dejaron de ver, ella, no estaba muy segura, porque hacía tiempo que no lo veía, y no sabía si había cambiado. Ella aceptó, aunque un poco insegura, pero aceptó, y quedaron de verse unos días después.
lido el capitulo bsos
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